"En un nuevo capítulo de nuestra Operación Arca de Noé, enviamos 27 individuos de 7 especies diferentes a Florencia, Caquetá, en Corpoamazonía", anunció el director de la Cárder, Julio César Gómez Salazar.
Los animales les habían sido incautados a personas, y a traficantes de animales, durante los constante operativos de la corporación en el departamento de Risaralda.
"El tráfico de fauna es una violencia silenciosa que desgarra la vida y destruye ecosistemas. Arrancar animales de su hábitat natural extingue las especies. Estamos rompiendo el equilibrio que sostiene nuestra propia existencia", explicó el Director de la Cárder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario