Risaralda está a un paso de asegurar el acceso a la alimentación por los siguientes 10 años

Foto: Gobernación de Risaralda

Derecho Humano a la Alimentación y Nutrición Adecuada, Envejecimiento Humano y Vejez, Discapacidad e Inclusión Social, Reconocimiento y Protección de los Derechos de la Población

Diversa por Orientación Sexual e Identidad de Género son las cuatro Políticas Públicas de la Gobernación.

La Gobernación de Risaralda se planteó como meta dejarle a los risaraldenses cuatro Políticas Públicas en materia social. La secretaría de Mujer, Familia y Desarrollo Social como líder se este proceso ha trabajado sin pausa para cumplir dicho objetivo, que en palabras más sencillas mejora la calidad de vida de todos los ciudadanos, en temas tan sensibles como la diversidad sexual, la vejez, la discapacidad y la alimentación, informó la administración departamental.

Este último de total afinidad al estilo de gobernar de Víctor Manuel Tamayo, un gobernador que en sus dos periodos administrativos le ha apostado a mitigar el hambre en las comunidades más vulnerables y que en el actual gobierno beneficia a cerca de 40.000 risaraldenses a través de 4 modalidades del programa “Risaralda sin Hambre”.

En este sentido, se espera que antes de terminar el presente año, la Asamblea Departamental apruebe la Política Pública para el Derecho Humano a la Alimentación y Nutrición 2023 – 2033, un insumo técnico de alto valor para los escenarios futuros de planificación en el departamento.

Igualmente, el proceso de construcción de la Política Pública inició en el año 2020 y desde entonces ha surtido todos los pasos para que hoy se encuentre en su fase final, destacando adicionalmente, el trabajo articulado y participativo a nivel municipal, departamental y nacional.  

¿Qué es una política pública alimentaria y nutricional?

Es una apuesta colectiva, desde la comunidad y la institucionalidad, para alcanzar el derecho humano a la alimentación, representado en seguridad alimentaria y nutricional, soberanía y autonomías alimentarias.

¿Cuáles son las líneas y ejes de esta política pública?

Disponibilidad, acceso, adecuación, sostenibilidad y sustentabilidad, y dos líneas que se enfocan en mecanismos de resiliencia frente a posibles crisis que impacten la situación alimentaria y nutricional.

¿Cómo se ha construido?

En primera medida se realizó un diagnóstico, que contó con la participación de los diferentes actores relacionados con el tema alimentario. Dicho proceso se hizo a través de 18 mesas de trabajo y un foro departamental; las mesas, fueron desarrolladas en todos los municipios del departamento y lograron vincular población indígena, afrodescendiente, víctima del conflicto armado, agro-productores convencionales, mercados agroecológicos y referentes institucionales.

¿Quiénes están involucrados en esta política pública?

Actores socio-comunitarios y entidades institucionales que tienen diferentes perspectivas alrededor de los temas alimentarios y nutricionales. En este orden de ideas participan todas las secretarias de la Administración Departamental, el Icbf, el Sena, universidades públicas y privadas del departamento (UTP-Unisarc-Unilibre), la Cárder, organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales.

¿Cuál son los objetivos de esta política pública?

• Robustecer la capacidad institucional del departamento para mejorar la pertinencia de las políticas, programas, planes y proyectos encaminadas al fomento del Derecho Humano a la Alimentación y Nutrición Adecuada.

• Fortalecer los procesos de gestión del sistema agroalimentario con enfoque territorial.

• Mejorar las condiciones sociales, económicas, culturales y ambientales que permitan el acceso permanente a una alimentación y nutrición adecuada.

• Promover acciones y estrategias para mitigar la malnutrición y enfermedades asociadas a condiciones culturales y patrones inadecuados en la ingesta de alimentos.

Con este panorama, queda claro que, Risaralda se convertiría en uno de los departamentos del país que con mayor viabilidad asegura los recursos y gestiones para que sus habitantes tengan acceso a la alimentación, puntualizó la Gobernación de Risaralda.