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| Carlos Humberto Isaza |
Isaza afirma que sabe por qué lo dice, porque conoce bien a Juan Pablo Gallo. Claro, Carlos Humberto Isaza reconoce ser víctima de Gallo quien siendo su mejor amigo al final lo dejó tirado en el proyecto de Senado cuando "su mejor amigo" era el Alcalde de Pereira.
Y se pregunta Carlos Humberto Isaza: "¿Quién, entonces podrá, confiar en él, en el futuro, si la traición, la deslealtad, la falsedad y la cobardía, amén de la deshonestidad y el abuso del poder, son las características que exhibe en su permanente actuar? "
A continuación les dejamos el texto completo de la columna "Folios", de Carlos Humberto Isaza, titulada: Les hicieron Conejo:
"El 24 de junio de este año, desconociendo a la Dirección Nacional Liberal, hubo una reunión convocada por el senador Juan Pablo Gallo, con las personas que de alguna manera habrían expresado su interés en participar de la escogencia del candidato por el Partido Liberal para las elecciones locales que se llevarán a cabo el 29 de octubre de 2023, orientadas a reemplazar al actual alcalde Carlos Alberto Maya.
Asistieron diez potenciales aspirantes, con la intención de conocer las reglas del juego que se aplicarían en el proceso. Una de ellas era que cualquiera que fuera el candidato se tenía que someter a la estrategia que diseñara la persona a la que el senador le había confiado las dos campañas a la alcaldía y la de su senado. Por consiguiente él (el senador) y el estratega (un tal Luis), asumían la condición de garantes imparciales del proceso de selección del candidato. Hubo otras reglas: que no se podría criticar la gestión del alcalde Maya, que el candidato tendría que salir de entre los asistentes a la reunión, que el jefe de debate sería el propio Gallo, que el candidato se seleccionaría mediante una encuesta aplicada en octubre (ahora), que las reglas eran inmodificables, etc., etc…
En un momento de la reunión uno de los asistentes increpó al senador, diciéndole que esperaban que en esta ocasión actuara con seriedad y no como en el proceso anterior, en el que el senador Gallo los puso a competir, teniendo ya una carta marcada: la de sus preferencias, quien a la postre resultó ungido con su dedo señalador, después de haber amañado el procedimiento, cuadrado las listas de dirigentes y la de los líderes de opinión y de haber volcado toda su administración hacia la escogencia de su pupilo. Al final lo logró, coronó sus deseos, se salió con la suya… y Maya fue alcalde en una difícil contienda entre ocho candidatos, en la que se jugó a fondo, dejando, de paso, jirones de su dignidad y de su honestidad, en el alambrado, al punto que la Procuraduría y la Fiscalía lo sorprendieron in-fraganti, corrompiendo electores y desviando la voluntad ciudadana, por lo que aún responde ante las instancias judiciales y disciplinarias.
Hace dos semanas, un medio local de comunicación, invocando una ‘fuente de alta fidelidad’, informó que Gallo había descabezado a cinco de los asistentes a la reunión del 24 de junio. ¡Ingrata sorpresa! De un plumazo corrompió el proceso. Una semana después, los medios dieron razón de que el senador Gallo había decidido, sin agotar ningún procedimiento y sin aplicar ninguna encuesta, escoger a dedo al candidato de sus preferencias. ¡Les hicieron conejo! La excusa de Gallo fue que había sido una decisión del estratega, ‘quién podía hacer lo que le viniera en gana’. Que era una decisión de quien, junto con él (el senador), había prometido que serían los garantes imparciales de las reglas inmodificables del proceso que les impusieron a los ingenuos precandidatos.
Los conozco demasiado y estoy seguro de que nadie, en ese desvencijado equipo del cambio, habría adoptado la determinación de escoger el candidato a la Alcaldía de Pereira, sin la aquiescencia de Gallo. Creer algo diferente es ser más cándido que los que aceptaron las reglas de juego impuestas por quienes no han respetado ninguna.
Ese fue el resultado de la ‘imparcialidad’ y de las ‘garantías’ con las que ambos se comprometieron ante los diez precandidatos. ¡Que sainete! ¡Que burla! ¡Que payasada! Mejor no hubieran hecho nada y habrían señalado, a dedo, al de sus preferencias, sin someter a los demás a un desgaste, a una burla y a ser payasos de circo. Sobra reconocer que quedó claro que en ese equipo, no manda Gallo, sino que él obedece lo que le impone quien le consigue los recursos de dudosa procedencia y le cuadra los negocios con los que se han convertido en los nuevos ricos de Pereira.
Claro que con esta actitud no solo graduó de enemigos a muchos de los aspirantes, sino que además convirtió en ‘David’ a uno de ellos, a Pablo Giordanelli, quien terminó siendo la principal víctima ofrendada en el holocausto al que Gallo suele llevar a sus amigos. Como lo hizo con Arango, con Patiño, con Robledo, con Samy, con Reinales… con todos.
¿Quién, entonces podrá, confiar en él, en el futuro, si la traición, la deslealtad, la falsedad y la cobardía, amén de la deshonestidad y el abuso del poder, son las características que exhibe en su permanente actuar? Tal vez ninguno de esos nueve burlados precandidatos le ofrecerá frentera resistencia, pero quedarán al acecho, como con el imperio romano, al que apenas lo vieron tambalear, todos se le fueron encima.
Voy a hacerle seguimiento a los sucesos de la administración y de la política, mientras espero sus virulentas reacciones y los comentarios de la prensa fletada y enchufada, pagada por la administración municipal. Esto apenas empieza. Mientras tanto, los que pretenden ser la alternativa están forjando sus armas y afilando sus plumas. Todo está siendo servido para un magnífico banquete. Allí estaremos.
Pereira, 16 de octubre de 2022
chisaza@yahoo.com"
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