jefe liberal con arraigo entre el pueblo
Horacio Serpa Uribe |
Serpa era muy querido por los empresarios más importantes de Colombia. Lo respetaban política e intelectualmente. Pero donde él realmente se sentía pleno, era en la plaza pública, lanzando sus destacados discursos, con un vibrato inigualable, que hacía enardecer a sus seguidores, liberales de trapo rojo.
Serpa tenía una gran aceptación en la comunidad internacional, donde era uno de los voceros más destacados de la socialdemocracia
Su gran aporte durante 40 años, fue servir como facilitador y negociador de paz. Su última actuación fue garantizar desde la jefatura del Partido Liberal la aprobación de la Justicia transicional, de la que fue ponente en el Senado y de la creación de la JEP.
La muerte de Horacio Serpa, como consecuencia del cáncer, deja un vacío grande en las huestes rojas y en la vida política de Colombia, por lo que representó como figura influyente de la vida nacional. Defendió como nadie las ideas y el trapo rojo al que le fue leal hasta su muerte, como pocos.
Fue gobernador de Santander su tierra natal, senador de la República, jefe único del Partido Liberal en varias oportunidades, candidato presidencial en los años 1998, 2002 y 2006 sin éxito, y fue presidente de la Constituyente de 1991 que le dio vida la Constitución de 1991 vigente hoy en Colombia.
Horacio Serpa Uribe, como jefe único del Partido Liberal fue pieza clave para que se pudiera lograr el acuerdo de paz con las Farc. Estaba casado con Rosita Mocada unión de la que quedan tres hijos: Sandra, Rosa, Horacio José, senador de la República. Escribió varios libros, entre ellos, “Crónicas: "Paz - posconflicto - reconciliación", y Testimonio de Solidaridad con la Democracia.
Dos de sus últimas frases en la vida política activa: "Soy liberal y milito en el partido rojo, hasta siempre", “La paz es muy difícil mientras valga más una bala que una idea”. Ah, y la legendaria expresión popular por la que siempre será recordado: ¡Mamola!
No hay comentarios:
Publicar un comentario