Al departamento de Risaralda le ha ido muy bien con el gobierno del Presidente Juan Manuel Santos en participación burocrática, en contraste con lo que ocurrió en la administración del Presidente Uribe.
Santos le ha entregado, no puestos de poca monta, sino de vanguardia. Inicialmente nombró al uribista Rodrigo Rivera en el ministerio de Defensa, hoy embajador de Colombia en la Unión Europea, en Bruselas; como Ministra de Vivienda a la conservadora Beatriz Uribe, aunque ya salió del gobierno, pero allá estuvo.
Ahora acaba de posesionar como Ministra de Justicia a la liberal Ruth Stella Correa Palacio, abogada y ex consejera de estado. Egresada de la Universidad Libre de Pereira.
El reto, si quiere pasar con honores en Risaralda es, por lo menos, hacer realidad la construcción de una cárcel regional, de cual tanto se ha hablado y nada de nada. Ahora es la oportunidad.
Rodrigo Rivera pasó muy rápido por el Ministerio de Defensa, y por Risaralda, su terruño, fue muy poco o nada lo que hizo.
En cuanto a la Ministra de Vivienda, le faltó mayor actitud por EL DEPARTAMENTO y fue poco lo que mostró.
En contrate con todo ello, en el gobierno de Álvaro Uribe, Risaralda estuvo opacado. Un solo nombramiento de relevancia, el de Juan Guillermo Ángel Mejía como Consejero Presidencial para las Islas de San Andrés y Providencia, y para el Chocó.
Uribe no fue consecuente, ni respondió al respaldo que Risaralda le dio en las urnas, pues fue de las más altas del país, proporcionalmente a su territorio.
Otra cosa son las inversiones que se hicieron en Risaralda, que se le reconocen a Uribe, y las que están por verse en el actual gobierno.
Oportunidades sí le ha dado el mandatario Juan Manuel Santos a Risaralda, otra cosa es que los ministros respondan o no.
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